***Taco y Enchilada***
(Vinicio Méndez y Jorge Dreyfus)
Hacer reír sobrepasa al arte
ya que es una gracia recibida
de lo alto…
...
Doradito por el sol que besa la piel
y con un bigotón que parece
embarrado de turrón…
Taco con sus ocurrencias
provoca las carcajadas que casi
terminan en miadas de a ramplón.
Enchilada lo observa con su mirada
picara y profunda…
Con esa tonada de voz tan iracunda
lo pone en su lugar.
Toco como si fuera un niño abandonado
toma su caja de lustre con su rotulo que
pregona “Unisex” y se sienta sobre ella.
Mientras Enchilada con curtido, salsa
y chile en la lengua empieza a recitar,
los versos que entre carcajadas se
suelen mal lograr.
Pero Taco y Enchilada en combinación
son un arranque de risas y pasión,
de chistes y ocurrencias que tocan el corazón.
Van vestidos como otro cualquiera
mas no se pierden entre la multitud,
porque llevan incorporada una luz,
Con la que brillan sin cegar.
Ocurrentes y chispudos como los chapines,
graciosos y cariñosos como los delfines,
a veces van descalzos otras con mocasines,
pero nunca usan calcetines…
Esos sombreros pasados de moda,
casi de piel, casi de cartón…
Con unos ojos que parecen que
saltan de emoción.
¡Hay Taco! Cuando vas a dejar ser patojo,
pareces como un piojo…
Que esta escarba que pica la cabeza
y Enchilado buscando una cerveza.
Originalidad y genialidad fundidos
como arena y cal…
Como el café al tamal…
Al punto que a los teutones ¡Tan Chilero!
les pareció que los pusieron a hablar
en alemán.
Estos dos “Chapines de Corazón”
aun siguen llenando de emoción
a todo aquel que los recuerda
y al hacerlo deja escapar una carcajada.
Oxwell L’bu
Imagen: Internet
(Vinicio Méndez y Jorge Dreyfus)
Hacer reír sobrepasa al arte
ya que es una gracia recibida
de lo alto…
...
Doradito por el sol que besa la piel
y con un bigotón que parece
embarrado de turrón…
Taco con sus ocurrencias
provoca las carcajadas que casi
terminan en miadas de a ramplón.
Enchilada lo observa con su mirada
picara y profunda…
Con esa tonada de voz tan iracunda
lo pone en su lugar.
Toco como si fuera un niño abandonado
toma su caja de lustre con su rotulo que
pregona “Unisex” y se sienta sobre ella.
Mientras Enchilada con curtido, salsa
y chile en la lengua empieza a recitar,
los versos que entre carcajadas se
suelen mal lograr.
Pero Taco y Enchilada en combinación
son un arranque de risas y pasión,
de chistes y ocurrencias que tocan el corazón.
Van vestidos como otro cualquiera
mas no se pierden entre la multitud,
porque llevan incorporada una luz,
Con la que brillan sin cegar.
Ocurrentes y chispudos como los chapines,
graciosos y cariñosos como los delfines,
a veces van descalzos otras con mocasines,
pero nunca usan calcetines…
Esos sombreros pasados de moda,
casi de piel, casi de cartón…
Con unos ojos que parecen que
saltan de emoción.
¡Hay Taco! Cuando vas a dejar ser patojo,
pareces como un piojo…
Que esta escarba que pica la cabeza
y Enchilado buscando una cerveza.
Originalidad y genialidad fundidos
como arena y cal…
Como el café al tamal…
Al punto que a los teutones ¡Tan Chilero!
les pareció que los pusieron a hablar
en alemán.
Estos dos “Chapines de Corazón”
aun siguen llenando de emoción
a todo aquel que los recuerda
y al hacerlo deja escapar una carcajada.
Oxwell L’bu
Imagen: Internet
No hay comentarios:
Publicar un comentario