Un lugar para descansar...
A veces uno solo quiere
encontrar, un lugar
para descansar...
Para sentir el corazón
agradecido y que cada latido,
sea una alabanza.
A veces, se precisa
de un lugar, que uno sienta
que le pertenece y que uno
pertenece al lugar,
una especie de simbiosis
espiritual.
Porque uno a veces,
está más que cansado
y se siente atado,
por tantos compromisos;
porque lo urgente no espera,
y las prioridades se han ordenado
de forma equivocada.
A veces uno solo quiere
estar solo, no porque
desee escapar,
sino más bien para
reencontrar el camino.
Y este es el lugar, mi lugar,
donde encuentro descanso
y esa paz que con sed
implora el alma...
Donde mi oración no es
de petición, sino de
agradecimiento.
Porque en este lugar,
siento el corazón contento
y aquí puedo encontrar,
lo que he perdido,
por eso exclamo:
Bendito Atitlan!
Bendito Dios por dejar
aquí, un pedacito,
de su paraíso.
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Foto: @jaoliva
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